Lenovo ha conseguido unos beneficios récord en los tres primeros meses de 2020: 665 millones de dólares, un 12% más que durante el mismo periodo de 2019. En cuanto a los ingresos conseguidos durante el periodo, han sido de unos 51.000 millones de dólares, de los que casi las cuatro quintas partes proceden de la venta de ordenadores.
Por tanto, el salto en el beneficio neto para la compañía entre enero y marzo ha sido posible gracias a su grupo de dispositivos inteligentes, que ha registrado un crecimiento interanual de ingresos del 25%, sobrepasando ligeramente los 2.000 millones de dólares. Dentro de ese grupo hay dos divisiones. Una es la de PC y dispositivos inteligentes, que al cierre del primer trimestre de 2020, el 31 de marzo, contaba con el 24,5% de cuota de mercado a nivel mundial de su sector.
El grupo al completo es el responsable del grueso de los ingresos y beneficios del grupo, con casi 40.000 millones de ingresos y un beneficio antes de impuestos de 2.300 millones de dólares. Son unas cantidades que reflejan un aumento interanual del 3,6% y del 18% respectivamente.
La segunda división de este grupo, el área de movilidad de Lenovo, no ha tenido un comportamiento tan bueno. De hecho, ha registrado unas pérdidas antes de impuestos de 43 millones de dólares, debido sobre todo a una reducción interanual de sus ingresos, que se han quedado en 5.200 millones de dólares, del 19,2%.
Según han manifestado desde la compañía, esta división ha registrado un fuerte impacto debido al cierre obligado de su principal fábrica de smartphones, situada en la ciudad china de Wuhan, por el COVID-19. De hecho, durante el último trimestre de 2019, cuando comenzó la crisis del COVID-19 en la zona, los ingresos de dicha área cayeron casi un 40% interanual, bajando de 1.400 millones de dólares a 824 millones.
En cuanto a la división de centros de datos de Lenovo, también registró una caída de ingresos en el periodo comunicado. En total, en los tres primeros meses del año este área ingresó 5.500 millones de dólares, un 8,7% menos que en el primer trimestre del año anterior. Esto se tradujo en unas pérdidas antes de impuestos en la división de 225 millones de dólares. En este caso, Lenovo achaca las pérdidas a la bajada en la demanda de hiperescala por la ralentización cíclica del sector.
El CEO de Lenovo, Yang Yuanquing, ha manifestado que la compañía «ha transformado su negocio de manera notable a lo largo del último año, durante uno de los periodos de transformación y cambio global más significativos que jamás hayamos experimentado. Desde alcanzar un récord en beneficios antes de impuestos de 1.020 millones de dólares hasta casi establecer un máximo de ingresos de 50.700 millones, no podría sentirme más orgulloso de nuestro sólido rendimiento«.
El directivo ha destacado también el papel de su compañía durante la pandemia que está azotando el mundo: «también me siento extremadamente orgulloso de la forma en la que hemos continuado respondiendo a la pandemia global como negocio y como ciudadanos corporativos. Aunque el mundo continúa afrontando tiempos inciertos, estoy seguro de que Lenovo aprovechará su excelencia operativa y presencia global para seguir implementando nuestra estrategia de transformación inteligente y aprovechar al máximo las oportunidades que nos ofrezca la nueva normalidad«.