Hace ya tres años que Lenovo y el equipo de motos de Ducati firmaron un acuerdo mediante el que la primera está ayudando con su tecnología a Ducati a mejorar en las carreras. En este acuerdo, que ayuda al equipo a arañar cada vez más segundos en la pista, juegan un papel muy importante tanto la Inteligencia Artificial como las analíticas de datos, y los sensores que van en las motos y en el equipamiento del equipo permiten que este tenga una visión completa del rendimiento de cada uno de sus motoristas y también a averiguar lo que les hace falta para ganar y avanzar.
En los deportes de motor, además de la fiabilidad, la velocidad es la clave. Ducati construye las motos más rápidas de MotoGP, pero en un entorno en el que las victorias pueden darse por una fracción de segundo, la velocidad no es tampoco todo. En ello influyen los datos y la tecnología. Para sacarles partido, Ducati cuenta con las soluciones centrales de «dispositivo a datos» de Lenovo, con las que el equipo puede sacar todo el partido a sus pilotos y a las máquinas que conducen. Y gracias a las soluciones de Lenovo, según el Manager tecnológico de Ducati Corse, Stefano Rendina, las motos están haciendo cosas que parecían imposibles hace solo una década.
Este tipo de progreso emplea montañas de información, además de herramientas de proceso potentes, y analíticas que saquen partido de ella. Por eso, las motos tienen más de 50 sensores que transmiten información detallada del rendimiento y se analizan gracias a servidores ThinkSystem SE350 Edge y equipos Lenovo ThinkPad P1. En Bolonia, los servidores se encargan de preparar los datos para un modelado complejo, con un software de modelado que rastrea la enorme lista de variables que pueden cambiar el comportamiento de la moto y el agarre de las ruedas. Entre otras variables, trabajan con la temperatura ambiental y la de la pista, así como con la humedad.
Las soluciones de tecnología ayudan a Ducati, por tanto, a estar conectados. Analizan el rendimiento, establecen comunicaciones con todo el mundo y consiguen probar diseños y después hacerlos realidad a gran velocidad. Incluso aunque haya desafíos logísticos y humanos como los de este pasado año. Con toda esta información, los pilotos pueden dar con el ángulo correcto para tomar una curva, idear una estrategia con base en la dirección y la velocidad del viento o encontrar el ingrediente que haga que sus ruedas lleguen al final. Todo, gracias a los datos.